Siempre tuve una fijación con las miradas y los ojos, nada muy original, en realidad; así que cuando me adentré en el mundo del bordado, mi primer idea fue hacer una serie de miradas bordadas. La primera de la que cree boceto fue Gualicho, que aún no he materializado en hilos por temas de tamaño.
Mal de ojo surgió después, porque tenía muchas ganas de experimentar con la técnica. Se trata de un bordado en la técnica de punch needle de 30 cm de diámetro.
Mal de ojo ha sido expuesta en dos oportunidades en exposiciones abiertas en Espacio Rodó y La Pintora, en Montevideo Uruguay. Mi idea de todos modos es que esta serie crezca con más piezas de arte textil y poder hacer una exposición individual.